Seguramente muchas veces haya oído decir: menos mal que ni el mundo ni las leyes de este mundo se basan en la Biblia ni en las enseñanzas de ella. Quizá usted mismo también lo haya pensado, pero qué tiene eso de cierto? Están esos prejuicios en lo cierto?

 

Muchas de esas  críticas están basadas en lecturas parciales de algunas porciones de la Biblia. Más explícitamente del antiguo pacto (el Antiguo Testamento) que Dios dio al pueblo de Israel. Estas críticas surgen the algunas de las leyes y ritos que Dios dio específicamente al pueblo de Israel, como nación, después de su salida de Egipto. Siendo Dios el máximo mandatario y dirigente de la nación (Israel). 

 

Jesucristo ya hizo la diferencia y aclaró que esas leyes no estaban vigentes, y que tras Su venida y Su resurrección pasamos todos a estar bajo un nuevo pacto.  (Nota: Los 10 mandamientos, por otra parte, nos representan una norma a seguir y unas leyes morales universales por las que debemos examinarnos).

 

Si nos ponemos a pensar y analizamos todas las enseñanzas de la Biblia, vemos que si toda la población del mundo cumpliese sus enseñanzas en la totalidad, nos encontraríamos con un mundo gobernado bajo las siguientes cualidades (respaldados con los versículos pertinentes en la biblia):  

 

• Ninguna distinción entre pueble, raza, o nación (no habría racismo)

• Ninguna distinccion entre personas.

• Ayuda continua a  los pobres.

• Ayuda a las/los viudas/os.

• No habría hambre

• Ayuda a los huerfanos.

• No habría guerras (nos amaríamos los unos a los otros).

• No habria opulencia.

• No habría distinción de clases sociales.

• No habría robo por parte de los gobiernos (ni por parte de los empresarios ni los empleados).

• No habría extorsión en el trabajo.

• No habría crímenes.

• No habría adulterio y las familias permanecerían unidas.

• No habriia envidias 

 

Desgraciadamente, es prácticamente imposible que todos los habitantes de la tierra decidan ser cristianos de verdad (se recomiendo leer el tema numero 3) y por eso es imposible pensar que toda la humanidad se pueda regir bajo las enseñanzas de la Biblia. Jesucristo ya era conocedor de esto y por eso él mismo instauró la separación entre la iglesia y el estado (Mateo 22 :21)

 

Seguramente usted se haya quedado impresionado con la riqueza de las enseñanzas de la Biblia y espero que su idea preconcebida haya podido ser aclarada.

 

Nota: Si  usted tiene alguna duda en lo que ha leído o si usted tiene alguna pregunta sobre algo que no le quede claro, por favor contáctenos, le responderemos a todas sus preguntas y le daremos toda la información que usted necesite.